lunes, noviembre 28, 2005

Eres mucho más idiota de lo que crees


Así define Lars von Trier el argumento de su primera película Dogma. La primera de una serie de filmes que se unen bajo esa denominación para retornar a la pureza artística. Dejando atrás cualquier artificio hollywoodiense que hoy día estamos acostumbrados a ver dentro de un cine más comercial.
En su filme "Idioterene" cede el protagonismo a una chica, Karen, mujer solitaria y reservada, la cual accidentalmente ingresa dentro de un grupo de jóvenes dispuestos a nadar a contracorriente para burlarse de esa sociedad tan racional en la que están inmersos. Presencia como estos muchachos se hacen pasar por retrasados mentales y se sorprende de que a pesar de considerarlo un engaño se siente feliz.
A simple vista parece un juego de rol, algo para pasar el rato. Pero ahondando más en el asunto hay toda una filosofía en esto. Pretender escapar de lo establecido para sacar su yo más absurdo. Actúan como idiotas para aprovecharse de la generosidad de la sociedad. En realidad es una crítica a este comportamiento moral tan lleno de hipocresía. Hacen cosas que molestan se aprovechan de situaciones.
Todo se sale de lo establecido cuando quieren llevar el juego a la realidad de cada uno. Uno a uno va renunciando a comportarse así dentro de su ámbito. Sólo Karen tiene el valor necesario para hacerlo.
Esta película refleja la importancia del argumento sobre cualquier otra cosa. Uno de los fines del Cine Dogma.
El cine Dogma sigue su propio manifiesto:
DOGME 95 es un colectivo de cineastas fundado en Copenhague en la primavera de 1995.
DOGME 95 tiene como fin formal luchar contra ciertas tendencias del cine actual.
¡DOGME 95 es un acto de sabotaje!
En 1960, ¡ya era suficiente!. El cine estaba muerto y pedía su resurrección. ¡El fin era justo, pero no los medios!. La nueva ola no se atrevía a ser más que un pequeño oleaje que iba a morir en el río convirtiéndose en lodo. Los eslóganes de individualismo y libertad hicieron nacer obras durante algún tiempo, pero nada cambió. La ola fue pasto de los más voluntariosos, así como de los directores. Pero nunca fue más fuerte que aquellos que la habían creado. El cine antiburgués se hizo burgués pues había sido fundado sobre teorías que tenían una percepción burguesa del arte. El concepto del autor, nacido del romanticismo burgués, era entonces... ¡falso!¡Para el DOGME 95 el cine no es algo individual!
Actualmente, una tormenta tecnológica está causando furor, el resultado será la democratización suprema del cine. Por primera vez, no importa quién es el que hace las películas. Pero, cuanto más accesibles se hacen los medios, más importante es la vanguardia. No es algo accidental por lo que la vanguardia tiene connotaciones tecnológicas. La respuesta es la disciplina... debemos ponerles uniformes a nuestras películas, porque el cine individualista será por definición decadente.
DOGME 95, para levantarse en contra del cine individualista, presenta una serie de reglas indiscutibles conocidas como EL VOTO DE CASTIDAD.
En 1960, ¡ya era suficiente! El cine había sido cosmetizado hasta su muerte, por así decirlo, ya que el uso de los cosméticos había aumentado considerablemente desde entonces.
La tarea suprema de los cineastas en decadencia es volver loco al público. ¿Es de esto de lo que estamos tan orgullosos? ¿Es esto lo que nos aportan los 100 Años? ¿Ilusiones para mostrar las emociones?... ¿Un abanico de supercherías elegidas por cada cineasta individualmente?
Previsiblemente el drama se ha convertido en el becerro de oro alrededor del cual todos bailamos. Hacer que la vida interior de los personajes justifique el argumento es demasiado complicado, y no es arte auténtico. Ya que, anteriormente, nunca las películas artificiales y las acciones superficiales recibieron toda la atención. El resultado es estéril. Una ternura ilusoria, un amor de ilusión.
¡Para DOGME 95 una película no es una ilusión!
Actualmente, una tormenta tecnológica está causando furor : elevemos los cosméticos a Dios. Utilizando la nueva tecnología, cualquiera en todo momento puede lavar los últimos restos de verdad en un abrazo mortal a las sensaciones. Las ilusiones son todo lo que una película puede esconder.
DOGME 95 se levanta contra el cine de ilusión, presenta una serie de reglas indiscutibles conocidas como EL VOTO DE CASTIDAD.
EL VOTO DE CASTIDAD
Juro que me someteré a las reglas siguientes, establecidas y confirmadas por:
1. El rodaje debe realizarse en exteriores. Accesorios y decorados no pueden ser introducidos (si un accesorio en concreto es necesario para la historia, será preciso elegir uno de los exteriores en los que se encuentre este accesorio).
2. El sonido no debe ser producido separado de las imágenes y viceversa. (No se puede utilizar música, salvo si está presente en la escena en la que se rueda).
3. La cámara debe sostenerse en la mano. Cualquier movimiento -o inmovilidad- conseguido con la mano están autorizados.
4. La película tiene que ser en color. La iluminación especial no es aceptada. (Si hay poca luz, la escena debe ser cortada, o bien se puede montar sólo una luz sobre la cámara).
5. Los trucajes y filtros están prohibidos.
6. La película no debe contener ninguna acción superficial. (Muertos, armas, etc., en ningún caso).
7. Los cambios temporales y geográficos están prohibidos. (Es decir, que la película sucede aquí y ahora).
8. Las películas de género no son válidas.
9. El formato de la película debe ser en 35 mm.
10. El director no debe aparecer en los créditos.
¡
Además, juro que como director me abstendré de todo gusto personal! Ya no soy un artista. Juro que me abstendré de crear una obra, porque considero que el instante es mucho más importante que la totalidad. Mi fin supremo será hacer que la verdad salga de mis personajes y del cuadro de la acción. Juro hacer esto por todos los medios posibles y al precio del buen gusto y de todo tipo de consideraciones estéticas.
Así pronuncio mi VOTO DE CASTIDAD.
Copenhague, Lunes 13 de Marzo de 1995.
En nombre de Dogme 95,
Lars von Trier - Thomas Vinterberg
ESCRIBE ALGO

3 Comments:

Blogger mago said...

Dogma esta bien, es un movimiento iconoplasta. Es bueno q alguien vuelva a los inicios para encontrar parametros. Pero algunos "cosmeticos" pueden hacer más facil la narración de la historia. y quizá el momento en una obra artísitica, no sea tan fundamental. Como en todo no hay q ser funadamentalista. Es buena la pelicula "Dogville" donde son los actores los q generan todas las películas. Pienso q lo mejor es q debe de haber de tó, para q nosotros el público eliga. Y por ello debemos defender a las filmografías no américanas para q puedan sobrevivir.

7:11 p. m.  
Blogger chusbg said...

Pues si que se lo pone difícil para hacer películas, aunque así se hacían antes, hace muchos años y salían algunas obras maestras.
No conocía el movimiento y te agradezco el artículo.
Un saludo

12:56 a. m.  
Blogger Cristi said...

De vez en cuando hay que hacer mención de experimentos de este tipo. Resulta bastante curioso, al oir hablar sobre el cine dogma creí que se trataba de una colgaera propia de daneses. Pero para hacer crítica es necesario ver antes alguna de las películas. Así que Mago, si no has visto aún ninguna, te animo a que lo hagas antes de dejar nada crítico escrito. Si ya lo has hecho, respeto tu opinión.
A ti Chusbg te recomiendo que veas ésta, la de los Idiotas. Se ve a la parfección el cumplimiento de todas las exigencias del voto de castidad. Aunque existen excepciones. Un saludo.

1:32 p. m.  

Publicar un comentario

<< Home

pasa el puntero del ratón por encima, le encanta jugar con él